Pymes ponen el foco en los primeros 90 días del nuevo gobierno chileno para que la reactivación no quede en anuncios

Un día después de las elecciones presidenciales en Chile, expertos aseguran que los tres primeros meses de gobierno serán cruciales para impulsar las promesas de reactivación económica de José Antonio Kast.

Desde una mirada técnica, académicos advierten que la efectividad de cualquier plan de reactivación económica dependerá de la capacidad de ejecución durante los primeros 90 días de gobierno, especialmente en lo que respecta a medidas que impactan directamente a las pequeñas y medianas empresas.

Rodrigo Pavón, académico y CEO de Fieldbeat, señaló que “desde la experiencia comparada y el análisis de políticas públicas, los primeros meses de una administración son determinantes para generar señales de confianza en la inversión y en el empleo. Si las medidas para apoyar a las pymes no se implementan con rapidez, el impacto económico se diluye y se pierde una ventana clave de reactivación”.

Pavón destaca que las propuestas orientadas a la rebaja de la carga tributaria, la postergación del pago de impuestos a las utilidades reinvertidas y la creación de incentivos para estimular la contratación formal van en “la dirección correcta para aliviar las restricciones y dificultades que han enfrentado las pymes en los últimos años”. 

Cualquier medida -explica- debe considerar un diseño que se base en un entendimiento profundo de las necesidades actuales de las pymes y, por supuesto, una implementación rápida y sencilla para cualquier tipo de organización.

“Las pymes son altamente sensibles a la incertidumbre regulatoria y a los costos asociados a su cumplimiento. La evidencia muestra que medidas bien intencionadas pierden efectividad cuando se enfrentan a trámites complejos o burocracia administrativa”, explicó Pavón, agregando que la anunciada facilitación regulatoria será clave para destrabar la inversión y acelerar proyectos que hoy se encuentran detenidos.

También se debe poner énfasis en sectores intensivos en empleo, como la construcción y la vivienda, donde la agilización de permisos y de proyectos pendientes podría generar efectos muy positivos en la actividad económica.

“Desde una perspectiva empresarial, no se trata sólo de anunciar reformas. Lo importante es priorizar acciones ejecutables en el corto plazo que permitan medir el avance y el impacto real en las empresas. La reactivación debe experimentarse rápidamente en la economía real, especialmente en las pymes, que concentran una parte relevante del empleo en Chile”, concluyó el experto.