Sydney Sweeney y Amanda Seyfried protagonizan “La Empleada”

- Dirigida por Paul Feig (“Damas de honor”), se estrenará en salas chilenas el 1 de enero. La preventa ya está disponible.
El 1 de enero debutará en cines “La Empleada”, la esperada adaptación del bestseller global “La Asistenta” [The Housemaid], la novela de Freida McFadden que arrasó en listas de ventas y que ahora encuentra en la dirección de Paul Feig y en las actuaciones de Sydney Sweeney (“Euphoria”) y Amanda Seyfried (“Mamma Mia!”) una nueva vida: más incisiva, más electrizante y tan adictiva como el libro.
La película sigue el ingreso de Millie Calloway al lujoso ecosistema de los Winchester, un hogar donde cada gesto está regido por las apariencias y donde el chisme funciona como arma. Entre modales impecables y reglas inamovibles, Millie descubre que nada es tan perfecto como parece y que la pregunta no es qué esconden los Winchester, sino cuánto demorará ella en darse cuenta de que ya está atrapada.
“Es una de esas historias que toca directamente miedos humanos que todos compartimos”
Paul Feig, quien ha dirigido éxitos como “Damas en guerra” y el remake de “Los cazafantasmas”, recuerda su impresión inicial:
“Fue magistral cómo Freida McFadden creó este mundo seductor y luego te pregunta: ‘¿Creías que querías todo esto? Adivina qué: no es lo que piensas’”.
Así surge Millie Calloway: un personaje obligado a sostener un trabajo que la consume emocionalmente, dominado por la exigente Nina Winchester. A partir de ahí la historia acelera como un tren desbocado, hecha de giros, engaños, secretos y un duelo constante por el control. McFadden lo resume con claridad: “La película es, en última instancia, la historia de escapar de una trampa, algo que siempre me ha intrigado”.
El fenómeno literario ha vendido más de 3,5 millones de copias, lleva más de 130 semanas en la lista del New York Times y fue traducido a 45 idiomas. Su impacto fue tal que incluso antes del estallido internacional, los productores compraron los derechos: una intuición certera para un material que pedía llegar al cine.
Sydney Sweeney, fan del libro antes de sumarse como protagonista y productora ejecutiva, explica su fascinación: “Es una de esas historias que toca directamente miedos humanos que todos compartimos. Nunca podía soltarla”.
Amanda Seyfried, también protagonista y productora, coincide: “Tiene todo lo que deseas en un buen thriller y es exactamente el tipo de historia que cobra vida magníficamente en la pantalla”.
Para traducir la arquitectura psicológica del libro al cine, el equipo convocó a la guionista Rebecca Sonnenshine, quien inyectó humor negro y dinamismo al thriller sin traicionar su oscuridad. Feig la recuerda como el ingrediente que faltaba: “No es una comedia, pero el público va a reír. Ese espíritu que Rebecca aportó me fascinó”.
Sonnenshine, conocida por subvertir estereotipos en “The Boys”, encontró en Millie un dilema universal: “¿Quién no ha lidiado con un jefe tóxico o se ha quedado en un trabajo por desesperación? Todos podemos identificarnos con Millie”.
Su adaptación retoma los temas del libro —clase social, autoimagen, poder— y los recrea con la casa Winchester como eje vertical: un espacio donde cada piso oculta una verdad y cada persona dice menos de lo que sabe. Incluso el círculo social que rodea a la familia funciona como amplificador de sospechas: elegante, mordaz y tan propenso a la traición como cualquier rincón del hogar.
McFadden celebra la audacia de la adaptación: “Al leer el guion de Rebecca, me dieron escalofríos. Todos los cambios funcionaban… Algunos eran tan buenos, que ojalá estuvieran en el libro”. Y sobre Feig, agrega: “Lo importante es que Paul sabía exactamente cómo crear un accidente ferroviario del que no puedes apartar la vista”.
“No podía imaginar a nadie más tan perfecta para Millie que Sydney Sweeney”
Millie llega a la casa Winchester buscando una segunda oportunidad. Duerme en su auto, está recomponiendo su vida y acepta un trabajo que parece extraído de un cuento moderno: una casa perfecta, una familia ideal, comodidades y una tarjeta de crédito abierta. Muy pronto descubre la grieta: su jefa, Nina Winchester, es un volcán emocional, impredecible y capaz de cambiar de tono en un parpadeo.
Sonnenshine la describe así: “Millie es divertida, inteligente, fuerte, está golpeada pero no rota”.
Feig tenía claro quién debía interpretarla: “No podía imaginar a nadie más tan perfecta para Millie. Sabía que Sydney podía hacerlo”. Sweeney sumó entusiasmo desde el inicio: “Es tan cruda, tan vulnerable, y su viaje es salvaje.”
Por su parte, Amanda Seyfried interpreta a Nina, la encarnación del orden y la elegancia. Pero detrás de esa fachada se esconden inseguridad, manipulación y una volatilidad emocional que convierte a la casa Winchester en un territorio impredecible. McFadden la define como “frágil pero feroz, manipuladora y desesperada”.
Seyfried encontró en Nina un papel lleno de matices: “Es tan multifacética. Nunca había visto un personaje como este en ninguna película”. Feig destaca su trabajo milimétrico: “Un minuto te quiere; al otro, te destruye psicológicamente”
Así, entre apariencias que se derrumban, secretos enterrados y giros que no dan respiro, “La Empleada” inaugura el 2026 cinematográfico con una historia que combina crítica social, tensión psicológica y humor oscuro. El 1 de enero, la pregunta será inevitable: ¿Quién está realmente atrapado en la casa Winchester?
FICHA TÉCNICA
Título original: “The Housemaid”
Título local: “La empleada”
Director: Paul Feig
Reparto: Sydney Sweeney, Amanda Seyfried, Brandon Sklenar
País de origen: Estados Unidos
Género: Thriller psicológico
Basada en: la novela “La Asistenta” [The Housemaid], de Freida McFadden
Distribuye: BF Distribution
Estreno en Chile: 1 de enero de 2026
BF Distribution
